martes, 13 de marzo de 2012

Historia de vida


Juana

Me llamo Juana y nací el 22 Julio de 1925 en Álora (Málaga). Tenía dos hermanos, uno de ellos ya fallecido. He trabajado en el campo, de ama de casa, niñera, cocinera, poniendo inyecciones, entre otras cosas. No tengo preparación académica ni siquiera sé leer ni escribir. Mi padre trabajaba en “lo que le salía” y mi madre haciendo trabajos artesanales (redondeles de molino para prensar el aceite, cestas, flores, escobones, etc.). Viví en muchas casas de alquiler, la más grande con dos habitaciones, dormíamos siempre “apretujados”, no teníamos muebles y comíamos en un cajón que utilizábamos de mesa donde se vaciaba la comida en un plato en el que comíamos todos.

De pequeña
Fui al colegio con 10 años solo durante 20 días ya que tenías que pagar un coste y mis padres no podían abonarlo, el colegio se llamaba “María Reinosa”, el cual estaba cerca de mi casa y por ello iba caminando. El colegio solo tenía una habitación donde solo habíamos 10 o 12 alumnos y nos sentábamos donde “pillábamos”, entrabamos a las 10:00  y salíamos a las 13:00, habíamos niños y niñas de diferentes edades, solo teníamos una “libretilla” donde aprendíamos las vocales “a, e, i, o, u”. Una única maestra era la que nos daba clase, la cual no tenía ningún título académico, solo era una de las personas humildes del pueblo que sabía leer y escribir y por ello impartía las clases. Lo que si hice durante más tiempo es ir a catequesis ya que no costaba dinero y si asistías siempre cada día te daban una papeleta y al final el que tuviera más la cambiaba por algún regalo, pero no llegué a hacer la comunión.

En mi infancia siempre he tenido que cuidar de mis hermanos ya que yo era la mayor de los tres y siempre he estado ayudando a mi madre en todo. Mi madre ha sido muy estricta con nosotros, y nos ha educado “a fuerza de leña”, siempre que estábamos en la calle jugando y escuchábamos “ssssshhh” corríamos hasta nuestra casa apresuradamente ya que esa era la llamada de nuestra madre. Una de las anécdotas que recuerdo relacionada con mi madre era un día que me pidió que comprara un ovillo de lana, y al regresar a mi casa tenía que pasar por encima de una acequia (arroyo), no sé como pero el ovillo se me callo y yo por temor a que mi madre me regañara me tiré a la acequia en su busca, por suerte que un hombre que estaba por allí me visualizo y vino a socorrerme.

Cuando tenía 11 años mi madre entro en la cárcel durante 4 años y medio a causa de que una vecina corrió el rumor de que mi madre había dicho cuando mataron a un hombre: “bueno... si lo han matado un fascista menos”, yo me hacía cargo de todos los quehaceres de la casa como por ejemplo iba a lavar al lavadero público, y a causa de mi corta edad no alcanzaba a lavar la ropa y entre todas las vecinas me ayudaban y enseñaban. Al salir mi madre de la cárcel nos empezó a ir económicamente un poco mejor. A mis 17 años mi padre se cayó a un rio y cogió un fuerte resfriado el cual no se le quitaba y a causa de ello murió.


Realizado por:
Laura María Gómez Domínguez

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