Me llamo Emilio y nací en 1929 en
una muy buena familia por lo que considero que tuve bastante suerte. No nací exactamente en
Priego de Córdoba sino en una aldea cercana pero me trasladé a Priego por la
familia y allí he pasado ya el resto de mi vida porque para mí es un pueblo
especial.
(Fuente del Rey de Priego de Córdoba antiguamente. Es uno de los monumentos más famosos y bonitos del pueblo. La fuente tiene 139 caños.)->
Comencé mis estudios en párvulos
a los 3 años, que entonces se le decía “las migas de los niños” y a los 6 años
fue cuando ya fui a la escuela.
Mi colegio era privado y
solamente era de niños. Recuerdo que se llamaba algo así como “Colegio de Don
Enrique Millán”. El colegio estaba lejillos de mi hogar, a unos 300 metros, pero aún así iba siempre andando.
Mi escuela era muy curiosa ya que
se trataba de una casa normal y en invierno las clases se daban arriba que era
más acogedor y en verano en la planta baja ya que hacía mucho más fresco.
Recuerdo que en las clases había para sentarse unos bancos corridos como los de
las iglesias pero con mesa incluida para poder escribir.
(Colegio de Priego de Córdoba, sobre 1940)
Mi colegio era sólo de niños y en
las clases estábamos mezclados más grandes con más pequeños entonces en la
clase estábamos del curso 1º al 5º y
serían de media 10 alumnos por curso pero estábamos todos juntos. Por esto
mismo sólo había un maestro, el cual, al principio era muy bueno y se le
respetaba mucho. Detallo al principio porque después empezó a beber y ya perdió
los papeles. Era muy bueno porque nos enseñaba mucho, despertaba bastante
curiosidad de aprender en nosotros y su método de enseñanza era increíble. Toda
la élite de mi pueblo de aquella época estaba estudiando conmigo como el
director del banco de Sevilla, gerente de una fábrica de tejidos… Dicen que era
republicano y a pesar de ser de izquierdas nos llevaba todos los días a misa y
cuando volvíamos a clase sorteaba 4 reales entre nosotros.
Era un colegio particular y no
tenía comedor ni se hacían actividades extraescolares aunque si generalizamos
eso no lo tenían casi por no decir ninguno.
No existía existencia religiosa
ya que el maestro nos llevaba a misa los domingos pero tampoco nos influía
mucho sobre el tema. Por el contrario, si existía bastante influencia política
porque iba la falange de vez en cuando a darnos charlas defendiendo a José
Antonio Primo de Rivera y mostrarnos así los 29 puntos de la falange. Una
exageración era que para ir a las oposiciones tenías que tener un certificado
de la falange e incluso cuando trabajaba me hacían ir a los sindicatos una vez
a la semana para recibir clases del movimiento falangista. Una de las
curiosidades que recuerdo de aquella época quien dice que a José Antonio Primo
de Rivera lo cogieron preso los rojos y por lo visto hicieron una proposición
de cambiarlo por un franco del otro bando pero franco no lo consintió.
No recuerdo el horario exacto en
que daba clase pero sé que en invierno también daba clase por la tarde y en
verano sólo por la mañana. También se tenía un recreo en medio de las clases y
algo curioso es que no se rezaba, cosa que ahora en los colegios actuales privados
si se reza por la mañana.
Con respecto a las vacaciones las de semana santa
eran las que más me gustaban porque siento pasión por una procesión de mi
pueblo y he sido incluso Hermano Mayor de esta. La procesión es el Viernes
Santo y es la de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Os preguntareis por qué tanto
ímpetu en ella y es que esta procesión es distinta a las demás, es especial
porque no la llevan con el paso malagueño o sevillano como las demás sino que
la lleva quién quiere y se empujan por llevarlo. El pueblo se llena de gente
ese día y me encanta verlo así y sobre todo que no haya cambiado la tradición
nunca.
<-( Esta es una foto del Nazareno de Priego de Córdoba en mi época.)
(Foto más actual del Nazareno)->
Esta procesión sube hasta el calvario del pueblo y allí Jesús tiene un
motor que hace que mueva su mano en forma de cruz bendiciendo así el hornazo. Esto es una gallina normalmente, de masa como de
pan con un huevo dentro que se come allí en el calvario tras ser bendecida por
el Santo. Aunque claro esto es algo más actual pero también lleva sus años.
Otra cosa curiosa de esta procesión es el hecho de
que a partir de la Plaza
del Palenque, antes de subir al calvario, se hace el paso elevado que es que
los 3 santos que salen lo llevan a Paso Ligero y hay una loza en el suelo que
pone “Paso Redoblado, Nuestro Padre Jesús Nazareno” pero esta la han hecho
actualmente. Aún sigo sintiendo ese sentimiento cuando la veo salir de la Iglesia y aunque ya no
puedo subir al calvario a verla debido a que es un largo camino y mis pies no
dan para mucho la tendré siempre en mi corazón junto a mi mujer.
Sobre a las asignaturas no había
distintas asignaturas ni libros sino que teníamos una enciclopedia y ahí lo
tenias todo: matemáticas, lengua… Entonces los materiales utilizados eran la
enciclopedia, la pizarra, una libreta, el lápiz y tinteros de pluma. Inglés no
porque por aquel entonces no era obligatorio entonces en mi escuela no se daba.
Lo que más me gustaba eran las
matemáticas y aún conservo amor por ellas.
Recuerdo que había un muchacho
que sumaba muy bien pero yo no me quedaba atrás e íbamos sumando de dos en dos
números mixtos a la vez. Esto era porque cuando trabajé en la tienda de tela
venían unas 40 piezas de tela de bichí (tela de camisa) entonces en la tienda
había que sumar todas las piezas para afirmar que el cargo estaba bien y nos
encargábamos él y yo. Yo siempre he tenido entusiasmo
por estudiar pero con 11 años me puso mi padre a trabajar en la tienda de tela
y para poder completar mis conocimientos daba clase por la noche con un médico
particular.
(Fábrica de tejidos- Priego de Córdoba)
Una de las cosas que recuerdo con
más ímpetu de mi clase también es que seleccionaban a los alumnos que mejor leían
y estos tenían que leer “El Quijote” en voz alta todos los años ya que es uno
de los mejores libros de la historia.
Con respecto a la disciplina
utilizada si era dura pero porque por aquel entonces era normal que un profesor
te pegara cosa que ahora puede ser denunciable incluso.
Los castigos que se implantaban
era ponernos con el libro en las manos de rodillas mirando a la pared, a veces
te daban un guantazo, también te pegaban con la regla, o un palmetazo en la
mano…
A mi una vez me pegó un cascotazo
el maestro y me revelé aunque después me arrepentí bastante de ello porque él
me dijo <<¿Tú también, Emilio?>> ya que yo siempre había sido bueno
y fue cuando todo el mundo ya empezó a perderle el respeto y yo no tendría que
haber actuado así.
Con relación a los profesores veo
que actualmente se le tiene muy poco respeto sin consideración ninguna y cuando
un alumno recibe un castigo los padres se molestan y se enfrentan al profesor,
cuando debían estar agradecidos a las enseñanzas que le imparten a su hijo. La
diferencia entre antiguamente y ahora es que entonces se respetaba a los
profesores y ningún padre de alumno se sentía molesto cuando recibían castigos
y no como ocurre actualmente.
Antiguamente existía relación
entre padres y profesores ya que si el niño no estudiaba se les llamaba para
que estuvieran al tanto y conforme a la relación entre el maestro y el alumno
normalmente era buena y los maestros se solían preocupar cuando había algún
alumno que destacaba. Por ejemplo a mi mujer su maestra le preguntaba que por
qué no se iba a estudiar que era una lástima que sus padres no la pusieran a
estudiar y ella siempre ha dicho que le hubiera gustado poder estudiar porque
era muy inteligente pero tanto en su caso como en muchos otros no había
recursos ni medios para que pudiera continuar estudiando.
Normalmente la gente no
estudiaba, no porque no quisiera, sino porque era muy difícil ya que por
ejemplo en los cortijos estudiaban en casos aislados gracias al maestro
itinerante.
Estoy escribiendo un cuento que
se llama “Una mano tendida” y trata sobre la educación antiguamente. Va sobre
que un abuelo le prometió contarle al nieto un cuento y este es sobre una aldea
en la que no había ni cura ni maestro entonces se nombró a uno como maestro
itinerante y tenía un alumno que era muy curioso y su única inquietud era
aprender y aprender. El padre del alumno no le entendía porque antiguamente no
los dejaban aprender decían que ya sabían bastante y el profesor habló con el
alumno para ver que le pasaba y después habló con su padre para ver si el niño
pudiera desarrollarse. Aunque al cuento aún le quedan páginas por escribir. *(Con respecto al cuento estoy en trámites de que me lo deje para que lo veáis aunque no esté terminado)
En resumen, dentro de mi época y
de cualquiera estudiar me sirvió muchísimo y la experiencia que recojo es
positiva ya que hay que prepararse en esta vida porque un país sin educación es
un auténtico desastre.
REALIZADO POR:
BEATRIZ DÍAZ ZURITA.
1º Educación Primaria.
BEATRIZ DÍAZ ZURITA.
1º Educación Primaria.
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